El Bayern estrena el domingo el liderato, que recuperó con una contundente goleada por 5-0 ante el Borussia Dortmund, con una visita al Fortuna Düsseldorf, uno de los equipos que le dio problemas en la primera ronda de la Bundesliga.

El Dortmund, por su parte, un punto por debajo del Bayern, jugará en casa el sábado ante el Maguncia.

El Fortuna, en su visita a Múnich a donde llegó como colista, le sacó al Bayern un increíble empate a tres goles, después de haber estado 3-1 por debajo en el marcador.

Desde entonces, el equipo dirigido por el veterano Friedhel Funke ha venido escalando posiciones y ya no tiene nada que ver con la lucha contra el descenso. Su campaña en la segunda parte del torneo ha sido digna de los equipos de la parte alta de la tabla.

El Bayern tampoco es el mismo del primer partido cuando atravesaba una crisis aunque hay momentos, como el duelo de hace una semana ante el Friburgo en el que no pasó de un empate a un gol o el difícil 5-4 logrado ante el Heidenheim en cuartos de final de la Copa de Alemania, en los que parece sufrir una especie de recaída.

En el Bayern es de esperar que, tras el desempeño mostrado ante el Dortmund, el entrenador Niko Kovac salgo al campo con la misma alineación titular, lo que implicaría dejar en el banquillo al colombiano James Rodríguez, a menos que algún jugador presente problemas físicos.

Sin embargo, Kovac ha sido siempre favorable a las rotaciones aunque ya no las practique de forma tan extrema como en la primera parte de la temporada cuando terminó siendo duramente criticado por ello.

El Maguncia, rival del Dortmund, es un equipo que ha mostrado en las dos últimas jornadas rostros antagónicos. Primero, cayó goleado por 6-0 ante el Bayern y luego goleó por 5-0 al Friburgo que había conseguido antes el empate ante el Bayern.

En la temporada pasada el Maguncia aseguró la permanencia justo con una victoria a domicilio ante el Dortmund pero eso, como lo ha advertido el entrenador Sandro Schwarz, es historia.

"No podemos regodearnos en los recuerdos", advirtió Schwarz que teme que el Dortmund, tras la derrota encajada ante el Bayern, salga al campo como una bestia herida.

EFE